Los pasos de Enric Valor
Enric Valor vivió en Agullent doce años, de manera intermitente, puesto que era suegro del médico del pueblo, Lluís Gea. Durante este tiempo, fue terminando las magníficas obras del Ciclo de Cassana. En Agullent (1977) acabó ‘Sense la terra promesa’, y en Agullent (1982) escribió ‘Temps de batuda’. Así, és sabido que los paisajes de Agullent: su sierra, sus plantas, sus pájaros… inspiraron más de una de las deliciosas descripciones paisajísticas que, como claros de un verde montañoso, se esparcen por las páginas de este autor enorme, tan fundamental para los valencianos.
Durante aquellos doce años, resultaba fácil encontrarse el grande Enric Valor por Agullent; a veces pasaba por la calle Mayor con su impecable Seat 850 Especial de color granate, con el sombrero en la cabeza levemente inclinado, saludando apenas con un gesto; otros, se dirigía a pie hacia la montaña, acompañado a menudo por algunos de sus amigos literatos.
Además de sus méritos como escritor, Enric Valor és uno de los pilares fundamentales en la recuperación de la cultura y la lengua propias de los valencianos, y nos enseñó a mirarnos con orgullo la preciosa lengua heredada de nuestros abuelos, a reconocer a través de la lengua a nuestros hermanos catalanes y mallorquines, a sentirnos fieles a nuestros orígenes, a concienciarnos de la necesaria normalización del valenciano, de la necesidad de una escuela valenciana, de la obligación de enderezar nuestra realidad cultural.
Y sus palabras no se perdieron con el viento, sinó que germinaron en nuestras conciencias y ahora ya somos una multitud de personas que hemos tomado como nuestro el legado del maestro Enric Valor
Vicent E. Belda (Vilaweb, 2005)